Destaca Tomás Bastos en una bella tarde

Vista Alegre acogió ayer la segunda de las novilladas del segundo Memorial Iván Fandiño con mucho más público que en la edición precedente, especialmente joven.

Se lidiaron tres bravos erales de Victoriano del Río que fueron nobles, si bien les faltó fuerza para completar una pelea ejemplar.

Mene dejó constancia de un concepto clásico, elegante y vertical. Recibió al primero con verónicas ajustadas y quitó en el tercero por tafalleras, manejando la capa con solvencia y pulcritud. En el tercio de muerte mostró serenidad y dominio, templando con gusto las nobles embestidas de su eral. Finalizó su larga faena con bernadinas y luquesinas, si bien pinchó dos veces antes de la estocada y el premio quedó en ovación y saludos.

Arturo Cartagena viste de marfil y azabache, peina su cabello a la gomina y garbea con estilo roto en el paseíllo. Se mueve cadencioso y escenifica cada pasaje de la lidia con esmerada parsimonia. Practica un toreo variado, valeroso, que busca la complicidad del público como base del triunfo. Ayer dibujó verónicas, chicuelinas, faroles de rodillas, gaoneras en un quite, mostrando suficiencia con el percal. Inició el tercio de muerte de rodillas en el platillo, citó al natural y en redondo, alegró con el pase de las flores, practicó el circular invertido y culminó con manoletinas de rodillas. Preparó la suerte suprema con protocolo solemne, pese a lo cual pinchó dos veces antes de prender una estocada contundente para saludar una ovación. Tiene una estética muy personal este torero colombiano, que concede importancia a cada gesto, todo con con aroma agitanado.

Tomás Bastos recibió a su eral girando sobre si en la suerte de la revolera templando después bellas verónicas. Replicó las tafalleras de Mene con gaoneras ajustadas. Pareó con alegría al cuarteo y al quiebro despertando la admiración de los tendidos. Citó de rodillas en el prólogo de la faena pasando al cambio con determinación para construir después una faena sólida, componiendo la figura con gallardía en cada embroque, todo con sentimiento torero, llegando al culmen en un natural eterno, con sabor clásico. Terminó el trasteo con redondos de hinojos que auguraban un premio grande, mas no fue así puesto que dejó dos pinchazos hondos en tres entradas, lo que le obligó a utilizar el descabello en el único momento de apuro que vivió en toda la tarde. Deja Bastos en Bilbao credenciales de toreo de inspiración, lo que el público reconoció en una merecida vuelta al ruedo.

Tarde de toros apacible, con erales bravos y novilleros que, cada uno en su estilo, agradaron al público y alimentaron la afición de Bilbao, que crece al ritmo del Memorial Iván Fandiño.

Reseña:

Plaza de toros de Vista Alegre de Bilbao. Viernes veintiuno de julio de 2023. Cerca de mil quinientas personas en tarde cálida y soleada.

Tres erales de Victoriano del Río en capas negras, de diferente presentación, nobles y bravos.

Primero: Negro, escurrido de carnes, cornidelantero. Bravo, berreón y flojo. Palmas en el arrastre

Segundo: Negro mulato. Con más alzada y volumen, capacho cornicorto. Bravo y flojo. Palmas.

Tercero: Negro mulato, escurrido, cornidelantero y abierto. Ovacionado de salida. Sufre una voltereta. Bravo. Ovación en el arrastre.

Mene, de verde hoja y oro: Dos pinchazos y una estocada (ovación y saludos)

Arturo Cartagena, de marfil y azabache: Dos pinchazos y una estocada (ovación y saludos tras aviso)

Tomás Bastos, de chenel y oro: Tres pinchazos, los dos últimos hondos y tres golpes de descabello (Vuelta al ruedo tras aviso)

Incidencias:

Segunda tarde del segundo Memorial Iván Fandiño.

Paco Ureña, que asistió a la corrida desde el callejón, ejerció de padrino de los novilleros, pronunciando unas palabras tras el paseíllo. Los toreros le brindaron la muerte de las reses.

Asistió mucho más público que en la edición anterior, con rostros jóvenes en los tendidos.

Javier Bustamante

para Toro Cultura