Rubén Pinar abre la puerta grande del Coliseum Burgos
La corrida de Victorino Martín jugada ayer en el Coliseum Burgos tuvo una desigual presentación, desde el musculado quinto de seicientos kilos cercano a los seis años, hasta los primero, tercero y sexto, escurridos y chicos, si bien todos llevaban tatuada en su piel cenicienta la impronta de la estirpe Albaserrada en forma de capas […]